The United Nations Office for Project Services (UNOPS)
La posición única de los pequeños Estados insulares en desarrollo del Pacífico durante la pandemia
Las Islas Marshall, Micronesia, Palau, Papua Nueva Guinea y Samoa, que se encuentran en el océano Pacífico, se enfrentan a unos desafíos únicos durante esta pandemia.
Descubra la versión digital de nuestro informe de sostenibilidad de 2020.
La COVID-19 se ha cobrado millones de vidas, ha destruido medios de subsistencia y ha diezmado economías en todo el mundo. Aun así, los Estados insulares del Pacífico contaron con una protección inicial frente al coronavirus gracias a que se ubican en una zona aislada geográficamente y cerraron pronto sus fronteras. Sin embargo, no fue suficiente.
Cuando empezaron a detectarse casos de coronavirus en la mayoría de estos pequeños Estados, surgió el riesgo de que la enfermedad se transmitiera rápidamente a nivel nacional. Entonces, estos países experimentaron un agravamiento de sus vulnerabilidades debido a que se encuentran en lugares remotos, tienen recursos limitados, los costos de transporte son elevados y la circulación de bienes es poco frecuente.
A medida que esta pandemia devastadora se extendía por todo el mundo, quedó patente que los frágiles sistemas de infraestructura de salud de estos Estados no estaban debidamente preparados para hacer frente a brotes de enfermedades infecciosas. Sus servicios de salud, que cuentan con pocos recursos, atienden a pequeñas poblaciones repartidas por numerosos atolones y archipiélagos, que abarcan miles de kilómetros. Los suministros y los equipos médicos escasean, y los que hay suelen encontrarse únicamente en los hospitales de las zonas con mayor densidad de población. Por este motivo, las personas que viven en lugares remotos deben recorrer largas distancias para tener acceso a la atención sanitaria, lo que conlleva un elevado costo.
A lo largo de esta pandemia, el personal sanitario ha expresado su creciente preocupación por la falta de equipos de protección personal y de suministros médicos básicos. Asimismo, ha mostrado su especial inquietud por el limitado número de respiradores y de camas en unidades de cuidados intensivos.
Sobre el terreno y preparados para actuar
«Cuando llegó la pandemia, nosotros ya estábamos colaborando con el Banco Mundial y otros asociados para ayudar al Ministerio de Salud de Papua Nueva Guinea a hacer frente al brote de tuberculosis, y estábamos rehabilitando clínicas comunitarias en Palau a través del Fondo de Asociación para el Desarrollo entre la India y las Naciones Unidas», explica Samina Kadwani, Directora de la Oficina Multipaís de UNOPS para Tailandia, Indonesia y los países del Pacífico.
Al trabajar en varios países del Pacífico, conocemos los desafíos a los que se enfrenta esta zona y contamos con preparación para intervenir y actuar de inmediato, lo que nos coloca en una posición única para dar respuesta a cualquier situación».
UNOPS está implementando una serie de iniciativas para ayudar a los Gobiernos de las islas del Pacífico a reducir los brotes de COVID-19 y a dar respuesta a las necesidades generadas por la pandemia a través de la rápida movilización y el aprovechamiento de las alianzas existentes en la región.
Entre estas medidas, que cuentan con una financiación de 33 millones USD por parte del Banco Mundial, se encuentra la adquisición de suministros médicos esenciales, equipos de protección personal y equipos de laboratorio para las Islas Marshall, Micronesia, Palau, Papua Nueva Guinea y Samoa.
Asimismo, UNOPS presta apoyo logístico en Papua Nueva Guinea para transportar de manera segura las muestras de laboratorio de COVID-19. Más al sur, en Samoa, la organización proporciona soluciones para la gestión de desechos con el fin de garantizar la eliminación segura de los residuos médicos peligrosos.
En Palau, UNOPS colabora con el Fondo de Asociación para el Desarrollo entre la India y las Naciones Unidas, gestionado por el Fondo de las Naciones Unidas para la Cooperación Sur-Sur, con el objetivo de mejorar la infraestructura sanitaria. A tal efecto, se llevan a cabo iniciativas como la rehabilitación de los centros de salud comunitarios y la adquisición de purificadores de aire y vehículos pesados para transportar los residuos médicos.
La labor que se está llevando a cabo en los países del Pacífico no solo da respuesta a las necesidades sanitarias inmediatas, sino que refuerza la atención sanitaria en toda la región para lograr un desarrollo sostenible que ayude a construir un futuro para los residentes de estas islas.