Líderes de todo el mundo se reúnen hoy en Bruselas para debatir cómo puede ayudar la comunidad internacional a atender las necesidades humanitarias y apoyar la recuperación económica y la reconstrucción en Siria.

Estas conversaciones son cruciales ya que la población de Siria se encuentra en un momento histórico. Se ha renovado la esperanza, tras décadas bajo un régimen brutal. No obstante, como han demostrado los acontecimientos de la semana pasada, también es un momento muy frágil. La perspectiva de un futuro mejor se encuentra en una encrucijada.

El desarrollo y la reconstrucción de Siria, por y para toda su población, depende de una transición política convincente e inclusiva. Es el momento de actuar con contundencia. Hay que poner fin a todo tipo de violencia y exigir la rendición de cuentas. La comunidad internacional tiene la obligación de apoyar este proceso.

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