The United Nations Office for Project Services (UNOPS)
Nuevo informe sobre el fortalecimiento de la resiliencia de los sistemas de salud
Un nuevo informe publicado por Economist Impact, y respaldado por UNOPS, recopila las perspectivas de diferentes especialistas sobre las medidas inmediatas que pueden fortalecer la resiliencia de los sistemas de salud.
El cambio climático, los conflictos y la pandemia de COVID-19 han puesto de relieve las vulnerabilidades de los sistemas de salud en todo el mundo. El informe "Fortalecer la resiliencia de los sistemas de salud ante un futuro incierto" se apoya en entrevistas con una serie de especialistas de Gobiernos, la comunidad académica y organizaciones sin ánimo de lucro. El informe examina los beneficios de desarrollar sistemas de salud resilientes en países de ingresos bajos y medianos, gracias a una mejor coordinación, adquisiciones públicas y cadenas de suministro eficientes, inversiones inteligentes en infraestructura, la adopción de tecnologías digitales y la atención de salud basada en el valor.
«Nuestro estudio presenta una serie de estrategias que se pueden utilizar para fortalecer los sistemas de salud y demuestra que la resiliencia puede desempeñar un papel importante al prepararse y responder a futuras crisis», declaró Sarah Aleyan, Gerente de Salud Mundial en Economist Impact.
«La gran presión a la que se han visto sometidos los sistemas de salud de todo el mundo amenaza el acceso a servicios de salud seguros y confiables, especialmente para las personas más vulnerables», afirmó Jens Wandel, Director Ejecutivo interino de UNOPS.
Nos enorgullece apoyar este informe que presenta soluciones que pueden contribuir al diseño de sistemas de salud resilientes, un pilar fundamental de los Objetivos de Desarrollo Sostenible».
Los riesgos emergentes, como la propagación de enfermedades infecciosas, la creciente incidencia de las enfermedades no transmisibles y el envejecimiento de la población están aumentando. Además de las perturbaciones provocadas por la crisis climática y los conflictos, los sistemas de salud enfrentan desafíos múltiples y complejos.
«Si no logramos que los sistemas de salud sean sólidos, sostenibles y resilientes, nos enfrentaremos a graves problemas en el futuro», afirma en el informe Shyam Bishen, Director de Salud y Cuidado de la Salud del Foro Económico Mundial.
Diferentes especialistas expresan argumentos sólidos en favor de inversiones proactivas para fortalecer la resiliencia, un elemento clave para actuar ya con el objetivo de limitar las consecuencias de las amenazas futuras.
En el informe, Somsak Chunharas, Presidente de la Fundación de Salud Nacional de Tailandia y ex Viceministro de Salud Pública de Tailandia, explica: «Si un sistema es resiliente, puede afrontar mejor una crisis, pero también puede aprovechar esa cualidad para conseguir resultados positivos en otros ámbitos. La resiliencia es beneficiosa para la salud en general».
Sin embargo, a pesar de los importantes alicientes para que los países fomenten la resiliencia de sus sistemas de salud, el informe concluye que una serie de barreras complejas persisten: la fragmentación de los sistemas de salud, los recursos limitados a nivel nacional, la capacidad de producción insuficiente y las malas prácticas de adquisiciones.
Publicado en la antesala de la Cumbre Mundial de la Salud de 2022, el informe presenta las principales estrategias extraídas del trabajo de investigación y orienta a personas responsables de la elaboración de políticas y a especialistas en el ámbito de la salud para superar los importantes desafíos en materia de salud pública.
Las estrategias se enmarcan en cinco ámbitos clave de los sistemas de salud: gobernanza, financiación, recursos, infraestructura y prestación de servicios. Los ejemplos expuestos en el informe muestran que la capacidad de un sistema de salud para adaptarse de forma eficaz a las necesidades de la población y los contextos cambiantes desempeñará un papel decisivo a la hora de mejorar los servicios de salud y de prepararse para futuros desafíos.
El informe concluye que está claro que todos los países deben garantizar que sus sistemas de salud estén mejor preparados para afrontar futuras crisis y amenazas, y que las lecciones de crisis anteriores se pueden utilizar como base en sus estrategias para fortalecer la resiliencia.
Este trabajo de investigación se suma a otras publicaciones de The Economist, elaboradas con el respaldo de UNOPS, sobre cómo la infraestructura y un mejor gasto público desempeñan un papel fundamental en el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.