The United Nations Office for Project Services (UNOPS)
Financiación adicional para crear empleo y medios de subsistencia en Afganistán
Un nuevo acuerdo firmado con el Banco Mundial reforzará aún más la resiliencia de las comunidades y apoyará a la población afgana vulnerable.
- Artículo publicado originalmente el 23 de febrero de 2024.
Novedades sobre el proyecto:
30 de abril de 2024
El Banco Mundial ha aprobado 84 millones USD de financiación adicional de la Asociación Internacional de Fomento (AIF) para el Proyecto de Resiliencia y Medios de Vida para las Comunidades de Afganistán.
Saber más (en inglés)
En 2022, tras la caída del Gobierno de la República Islámica de Afganistán, 42 millones de personas que ya habían sufrido décadas de guerra, una economía frágil y desastres climáticos frecuentes se enfrentaron a una de las peores crisis humanitarias del mundo. Ante este contexto desafiante, el Banco Mundial y el Fondo Fiduciario para la Resiliencia de Afganistán pusieron en marcha el Proyecto de Resiliencia y Medios de Vida para las Comunidades de Afganistán (CRL), gestionado por UNOPS.
Hasta la fecha, este proyecto de 265 millones USD ha beneficiado directamente a más de 750.000 hogares de todo el país. El Banco Mundial y UNOPS han firmado una ampliación del acuerdo original que supone una financiación adicional de 70 millones USD para el proyecto.
«La crisis humanitaria en Afganistán continúa, pero es necesario crear medios de subsistencia y empleos que permitan a las comunidades valerse por sí mismas y ayudarse mutuamente. Las mujeres y los hombres de Afganistán quieren empleos», declaró Susan Wong, Responsable del Equipo de Trabajo del Proyecto CRP del Banco Mundial.
Este proyecto se desarrolla a nivel de la población para ayudar a familias y las comunidades a aumentar su resiliencia».
«En colaboración con UNOPS, el proyecto ya ha proporcionado medios de subsistencia a corto plazo a casi un millón de personas, pero sigue habiendo muchas más necesitadas y tenemos mucho trabajo por delante. El proyecto también respalda al sector privado, incluidas más de 4.000 pequeñas empresas y proveedores de zonas urbanas y rurales», añadió Tahir Akbar, Responsable del Equipo de Trabajo del Proyecto CRP del Banco Mundial.
En las zonas rurales y urbanas, los hogares pobres forman parte de proyectos de efectivo por trabajo, en los que se ofrece empleo durante períodos de 28 a 60 días a cambio de entre 4,50 y 7 USD al día, una cantidad suficiente para comprar alimentos para el hogar durante aproximadamente cuatro a seis semanas.
«A pesar de trabajar en circunstancias impredecibles y desafiantes, el proyecto ha conseguido llegar a mujeres y hombres vulnerables. El Proyecto CRP crea puestos de trabajo y medios de subsistencia, lo que permite a las comunidades asumir la titularidad activa de sus proyectos», afirmó Nicholas George, Director y Representante de la oficina de UNOPS en Afganistán.
Las actividades de efectivo por trabajo requieren gran densidad de mano de obra. Normalmente consisten en limpiar carreteras, canales y desagües; crear parques y espacios verdes al aire libre; reparar aceras y carreteras de grava; construir infraestructura de suministro de agua y saneamiento a pequeña escala; y mejorar los mercados.
Para ayudar a los hogares que no pueden proporcionar mano de obra, el Proyecto CRP concede subsidios sociales en forma de alimentos o dinero en efectivo para ayudar a estas personas especialmente vulnerables.
Este apoyo llega en un momento decisivo para las familias. El dinero en efectivo a cambio de trabajo puede ayudar a la población a alimentar a sus familias y a no tener que vender su ganado o sus escasas pertenencias para sobrevivir. También puede ayudar a las personas a evitar estrategias de supervivencia perjudiciales e insostenibles y darles tiempo para encontrar otras formas de salir adelante».
«Además, el proyecto deja tras de sí un activo –ya sea una carretera, un muro de protección, un parque ajardinado o un canal limpio– que toda la comunidad puede utilizar y del que puede beneficiarse», añadió.
Hasta la fecha, casi 900.000 personas han obtenido empleo en las más de 5.000 actividades de gran densidad de mano de obra y de efectivo a cambio de trabajo, lo que ha beneficiado a más de 9 millones de personas en todo el país.