The United Nations Office for Project Services (UNOPS)
Despliegue eficaz de las misiones de mantenimiento de la paz
En las misiones de mantenimiento de la paz, a menudo los ingenieros son los últimos en incorporarse, pero deberían ser los primeros. A continuación, se analizan los motivos.
En la carrera por desplegar una misión tras el estallido de un conflicto, al principio el personal de mantenimiento de la paz suele carecer de las infraestructuras necesarias para garantizar el éxito de la misión y velar por su propia seguridad, como son los campamentos o los puentes y carreteras transitables. Precisamente son estas infraestructuras las que los ingenieros diseñan y construyen y, aun así, estos profesionales suelen ser los últimos en incorporarse a una misión.
A menudo, se envían ingenieros a expensas del cuerpo de infantería debido al número limitado de efectivos en las tropas que se destinan a una zona en conflicto. A ello se suma el hecho de que, para empezar, algunos Estados Miembros de las Naciones Unidas no cuentan con contingentes de ingenieros que puedan incorporar a las misiones.
No obstante, este problema se puede abordar con la creación de un cuerpo de profesionales de la ingeniería que pueda desplegarse en cualquier parte y en cualquier momento. Compuesto por ingenieros provenientes del ámbito militar, del sector privado y de las Naciones Unidas, este contingente híbrido se sumaría a la tarea del personal de mantenimiento de la paz sin sustituirla.
Los contingentes de este tipo podrían preparar el terreno en materia de infraestructuras para las organizaciones regionales e internacionales, lo que permitiría al personal de mantenimiento de la paz comenzar a trabajar arduamente de forma mucho más rápida.
Asimismo, el personal de los contingentes de ingeniería podría recibir capacitación y asesoramiento continuos sobre el terreno durante la misión. Esto les permitiría desarrollar plenamente las capacidades que servirán como apoyo tanto para las misiones de mantenimiento de la paz como para las comunidades locales, al mismo tiempo que les brindaría la oportunidad de adquirir una serie de competencias sólidas que pudiesen poner en práctica al regresar de la misión.
Enfoque regional para un despliegue inmediato
A medida que las Naciones Unidas continúan poniendo en marcha proyectos para apoyar la ingeniería, los Estados Miembros que forman parte de organizaciones regionales, como la Unión Africana, deben ser el centro de atención. ¿Por qué?
Tras la adopción de una resolución del Consejo de Seguridad, una misión de mantenimiento de la paz se puede demorar hasta dos años antes de alcanzar una plena capacidad operativa; un retraso considerable cuando existe un conflicto en pleno auge. Por motivos geográficos y políticos, la Unión Africana puede enviar equipos de mantenimiento de la paz más rápidamente a un conflicto que se origine en su región, casi inmediatamente después de que este estalle, aunque normalmente no cuentan con los equipos necesarios para desempeñar las actividades de modo eficiente.
En el caso de los conflictos en la República Centroafricana y Malí, por ejemplo, la Unión Africana envió a la Fuerza de Reserva Africana mucho antes de que en las Naciones Unidas se alcanzaran los acuerdos necesarios entre el Consejo de Seguridad y los Estados Miembros sobre el despliegue de las tropas.
Este ejemplo ilustra la naturaleza cambiante de las operaciones de paz. La responsabilidad se halla cada vez más descentralizada al trasladarse desde las organizaciones internacionales a las regionales. Por tanto, los esfuerzos destinados a crear dichos contingentes de ingeniería deben centrarse inicialmente en las organizaciones regionales, como es el caso de la Unión Africana
Beneficios a largo plazo tras las misiones de mantenimiento de la paz
En muchos de los Estados miembros de la Unión Africana existe la necesidad de implementar obras de ingeniería y desarrollar infraestructuras con más urgencia que en cualquier otra parte del mundo. La formación de los contingentes de ingenieros no solo contribuiría a una intervención más rápida en los Estados que sufren conflictos, sino que también permitiría desarrollar o potenciar la capacidad de respuesta interna ante desastres y emergencias.
Naturalmente, existen aspectos en los que se debe trabajar antes de crear dichos equipos de ingeniería, como quién los financiará, cómo se organizará la disponibilidad de maquinaria pesada (decidir si ofrecer una mayor disponibilidad de las reservas estratégicas, adquirir más equipos o alquilarlos) o qué Estados Miembros deben ser los primeros en beneficiarse.
Sin embargo, responder a estos interrogantes es mucho más sencillo que explicar por qué los países continúan comprometiendo al personal de mantenimiento de la paz en conflictos graves sin proporcionarles una infraestructura básica que les sirva de apoyo.
Responder a estos interrogantes es mucho más sencillo que explicar por qué los países continúan comprometiendo al personal de mantenimiento de la paz en conflictos graves sin proporcionarles una infraestructura básica que les sirva de apoyo».
Andrew Reese
Andrew Reese trabaja en la oficina de UNOPS en Nueva York, donde es responsable de consolidar y ampliar la relación de la organización con la Secretaría de las Naciones Unidas, así como las actividades de UNOPS en los ámbitos de la paz y la seguridad. Anteriormente ha gestionado portafolios complejos de programas para UNOPS y el Departamento de Operaciones de Mantenimiento de la Paz (DOMP) en Chipre, Jordania, Líbano, Libia, Iraq, el Estado de Palestina y Somalia. También ha dirigido actividades de desarrollo de la capacidad en apoyo de la División para la Paz y la Seguridad de la Unión Africana en colaboración con el DOMP y la Unión Europea.